viernes, 18 de junio de 2010

José Saramago (I)

1 comentario:

Anónimo dijo...

"No
creo en Dios y no me hace ninguna falta. Por lo menos estoy a salvo de
ser intolerante. Los ateos somos las personas + tolerantes del mundo. Un
creyente fácilmente pasa a la intolerancia. En ningún momento de la
historia, en ningún lugar , las religiones han servido para que los
seres humanos se acerquen unos a otros.(...)No creo en Dios, no lo
necesito y además soy buena persona."
(J.S.)